Signos que Indican la Necesidad de un Rebranding
A medida que las empresas crecen y evolucionan, su identidad visual también debe hacerlo. Aquí algunos indicadores que señalan que podría ser el momento de considerar un rebranding:
Cambio en el público objetivo: Si tu empresa ha expandido su mercado o ha cambiado de enfoque en términos de audiencia, es esencial que tu identidad visual refleje esos cambios.
Un estudio de Lucidpress revela que el 77% de las marcas creen que la coherencia en su identidad visual es clave para el crecimiento. Sin embargo, si tu diseño actual no resuena con la nueva audiencia, es momento de repensarlo.
Fusión o adquisición: Las fusiones y adquisiciones a menudo conllevan la integración de dos culturas y marcas.
Un rebranding puede ayudar a unificar las identidades visuales de ambas entidades, creando una nueva marca que represente los valores combinados.
Cambio de misión o valores: Las empresas evolucionan, y con ello, su misión, visión y valores pueden cambiar.
Estos elementos son fundamentales para la identidad visual, por lo que cualquier alteración significativa puede requerir una actualización en el diseño gráfico para mantener la coherencia.
Desactualización visual: El diseño gráfico, como cualquier otra tendencia, cambia con el tiempo. Si tu logo o materiales visuales parecen anticuados, podría ser el momento de un refresco.
Según un informe de WebFX, el 38% de los usuarios dejarán de interactuar con un sitio web si su diseño es poco atractivo, lo que subraya la importancia de una identidad visual moderna.
Beneficios de un Rebranding Efectivo
Un rebranding bien ejecutado no solo rejuvenece la imagen de la empresa, sino que también puede traer beneficios tangibles:
Aumento en la percepción de valor: Una nueva identidad visual puede revitalizar la percepción de la marca, haciéndola más atractiva y relevante para los consumidores.
Por ejemplo, después del rebranding de Dunkin’ (anteriormente Dunkin’ Donuts), la empresa reportó un aumento significativo en el reconocimiento de marca y en la fidelidad de los clientes.
Mayor competitividad: En mercados saturados, un rebranding puede diferenciar a tu empresa de la competencia. Al reflejar una imagen más moderna y alineada con las expectativas del mercado, es más probable que los consumidores elijan tu marca sobre otras.
Refuerzo de la cultura interna: Un nuevo diseño no solo afecta la percepción externa, sino también la interna. Un rebranding puede ser un símbolo de cambio y progreso para los empleados, fomentando un sentido renovado de pertenencia y alineación con la misión de la empresa.
Cómo Abordar un Rebranding Exitoso
El proceso de rebranding debe ser estratégico y bien planificado. Aquí algunos pasos clave:
Investigación de mercado: Antes de cualquier cambio, es vital comprender cómo es percibida tu marca actualmente y qué espera tu audiencia. Esto asegura que el nuevo diseño gráfico se alinee con las expectativas del mercado.
Definición de objetivos claros: El rebranding debe estar alineado con objetivos específicos, como alcanzar nuevas audiencias, modernizar la marca, o reflejar cambios en la misión empresarial.
Colaboración con expertos en diseño: Trabajar con un equipo de diseño gráfico experimentado es esencial para traducir la visión de tu empresa en una identidad visual coherente y atractiva.